Resulta peculiar que hasta en el diario La Jornada, un periodista de izquierda haya escrito un mensaje lo suficientemente crítico con el fenómeno migratorio actual, como para llamar la atención.
Esto lo tenemos que tomar con cierta cautela, puesto que a fin de cuentas, quien gobierna ahora es López Obrador. Siguiendo la máxima de que una vez que una causa ha triunfado, quienes pasan a regentar el país en su nombre dejan de ser disidentes para convertirse en la derecha o en la reacción, la conducta convenenciera de los obradoristas en este sentido es comprensible.
Para ellos el fenómeno migratorio actual constituye una desestabilización contra el gobierno de la 4T. Por ende, no van a aplicar la clásica consigna de que “ningún ser humano es ilegal” o de que si aceptamos el libre tránsito de mercancías también deberíamos de aceptar el libre tránsito de personas. Tal vez si gobernaran los panistas, el obradorismo podría apelar al viejo internacionalismo izquierdista pero ese no es el caso y la situación ahora es distinta.
Para el columnista de la jornada Jorge Durán, la caravana que en el 2018 condujo alrededor de 7000 personas desde la frontera con Guatemala a Tijuana, cuando aún gobernaba Peña Nieto, representa una ruptura del orden establecido. El columnista también tiene a bien mencionar también la ocupación de Ciudad Acuña por parte de una masa de inmigrantes haitianos en el 2021 y que caravaneros venezolanos plantaron su bandera en señal de provocación contra nuestras “autoridades” en el 2023.
Es bueno que los lectores del diario izquierdista La Jornada conozcan estas cosas. Sobre todo cuando desde el 2016, los nacionalistas hemos exigido respeto a nuestra soberanía fronteriza y hemos demandado protección para la población nativa, víctima del pandillerismo y los abusos de estos extranjeros. En aquel entonces, esa izquierda acomodaticia rápidamente salió en defensa de la solidaridad internacional y el respeto a los derechos humanos, acusando a los nacionalistas de racismo y de incitar al odio, cuando lo único que hicimos fue movilizarnos en defensa de nuestros derechos.
En el mencionado artículo, fechado el pasado 5 de noviembre, el columnista también fustiga a Marcelo Ebrard por haber hecho acuerdos lesivos a la soberanía nacional con las autoridades de Estados Unidos en tiempos de Donald Trump, lo cual me parece loable pero extemporáneo, pues difícilmente estarían quejándose los izquierdistas si el dedazo de Palacio nacional hubiese ungido a Marcelo y no Claudia Sheinbaum.
Aún así, yo me quedo con la última reflexión de Jorge Durand con respecto a que es absurdo permitirle el paso a estas olas migratorias con el solo fin de que Estados Unidos los deporte posteriormente, cuando lo que deberíamos hacer es blindar la frontera para maras y traficantes no aterroricen a nuestros hermanos en Tapachula y otras regiones del país.
¡Controles migratorios!
¡Soberanía fronteriza!
Fuentes originales:
https://www.jornada.com.mx/noticia/2023/11/05/opinion/fase-disruptiva-de-la-migracion-779
